Tras sismos, 450 inmuebles históricos han sido restaurados en su totalidad
Los sismos del 7 y 19 de septiembre de 2017 provocaron que 2,340 bienes inmuebles y 5,789 bienes muebles sufrieran diversos daños, por lo que de inmediato se activó un Plan Maestro cuyo objetivo es restaurar el patrimonio cultural afectado, en conjunto con los tres órdenes de gobierno, el sector privado, la participación de la comunidad, especialistas, organismos internacionales e instituciones religiosas.
La la Fase 1 de dicho plan se llevó a cabo de octubre de 2017 a marzo de 2018, y consistió en realizar acciones emergentes de apuntalamiento y salvaguarda, ponderación de los daños, consecución de un esquema de financiamiento, así como la realización de los primeros trabajos de restauración en las 11 entidades afectadas: Estado de México, Puebla, Oaxaca, Morelos, Tlaxcala, Chiapas, Guerrero, Tabasco, Hidalgo, Veracruz y la Ciudad de México.
La Fase 2, de abril a noviembre de 2018, consiste en asignar los fondos a la totalidad de los trabajos, tener propuestas de intervención para todos los inmuebles, y elaborar proyectos de mayor complejidad, así como concluir los trabajos menores y parte de los moderados. La Fase 3 está programada de diciembre de 2018 a diciembre de 2020, periodo en el que se prevé concluir en sus totalidad la restauración de todo el patrimonio.
Al día de hoy, México ha recuperado gran parte de su esplendor con la restauración, en su totalidad, de 450 inmuebles históricos y 41 zonas arqueológicas. Cabe destacar que la mayor parte de los inmuebles afectados fueron templos, conventos y capillas del periodo virreinal y del siglo XIX, así como obras de arquitectura vernácula, bienes con valor artístico, museos y zonas arqueológicas, de las cuales 431 registraron daños severos, 1,019 moderados y 890 daños menores.
En tanto, de los bienes muebles dañados fueron, en su mayoría, pinturas murales y de caballete, campanas, retablos, órganos, mobiliario histórico, vitrales, portones, decoraciones de argamasa, yeserías y elementos escultóricos en fachadas.
En un principio, se levantó un censo de los daños a través del INAH con la puesta en marcha de 48 brigadas y 1,100 especialistas, quienes recorrieron comunidades y municipios para verificar las afectaciones y, con recursos del Fondo de Desastres Naturales (Fonden), tomar medidas inmediatas para brindar seguridad a las personas y prevenir mayores daños.
Además, desde la activación del Plan Maestro, la Secretaría de Cultura, el Instituto Nacional de Antropología e Historia, el Instituto Nacional de Bellas Artes y la Dirección General de Sitios y Monumentos del Patrimonio Cultural, han coordinado esfuerzos con todos los niveles de gobierno, instituciones académicas, asociaciones religiosas, grupos comunitarios, organismos privados e instancias internacionales, para identificar y diagnosticar los daños, así como en planear la recuperación total del patrimonio.
Asimismo, se lanzó la convocatoria ‘Intégrate a la restauración del patrimonio cultural’, con el objetivo de sumar a estudiantes, profesionistas, académicos y universidades a los trabajos de recuperación; se conformó un Comité Técnico-Científico para analizar los problemas de mayor complejidad técnica y, se integró un Comité Ciudadano, conformado por reconocidos miembros de la sociedad civil para dar continuidad y transparencia al proceso de restauración.
Para conocer más sobre el trabajo que se ha realizado en la recuperación del patrimonio cultural se puede visitar la plataforma digital www.restauracionpatrimonio.cultura.gob.mx.
Fuente: Centro Urbano
