Reparan a la ligera inmuebles tras 19S
Haciéndolas pasar como reparaciones menores, propietarios de inmuebles afectados por el sismo del 19 de septiembre en la Roma Norte e Hipódromo los intervienen sin supervisión alguna.
A siete meses del temblor, los comités ciudadanos han ubicado en estas colonias al menos tres casos: uno en Ámsterdam 15, otro en Yucatán 92 y uno más en Guanajuato 65, han confirmado autoridades.
Los dueños se han valido del Artículo 62 del Reglamento de Construcciones de la CDMX para obra menor, que permite intervenir los inmuebles sin afectar la estructura de los mismos.
Bajo este recurso, basta con dar aviso a la Delegación, sin requerir que la autoridad autorice un proyecto de construcción.
Edgar Tungüí, Comisionado para la Reconstrucción, indicó que pedirá apoyo del Instituto de Seguridad para las Construcciones (ISC) y del Gobierno delegacional para verificar que no haya más abusos.
«Desde luego se corre el riesgo de que alguien arregle sólo lo estético y no se meta a lo estructural pudiendo haber este daño», dijo en entrevista.
En Ámsterdam 15 está un edificio de ocho niveles donde fragmentos del frente y ventanas quedaron sobre la banqueta tras el temblor. Pese a los daños y sin una evaluación en la Plataforma CDMX, actualmente los departamentos son remodelados.
En Yucatán 92 una evaluación postsísmica catalogó de riesgo medio el edificio, sin embargo, segmentos de los muros frontales son retirados. Los trabajos fueron suspendidos por personal de la Delegación Cuauhtémoc, pero después se retiró la suspensión por una opinión favorable de la Dirección de Obras.
En Guanajuato 65, vecinos documentaron la ruptura de una trabe y daños al interior. Haciendo pasar los trabajos como una remodelación la terraza fue convertida en un piso extra.
La corrupción con funcionarios delegacionales es lo que permite el mal uso del Artículo 62 del Reglamento de Construcciones de la Ciudad para la reestructuración de edificios dañados por el 19S, consideró Isaac Ades, arquitecto con 15 años de experiencia en proyectos de restauración en Roma-Condesa.
«El riesgo es que si tienes un edificio que se afectó de manera importante, con un Artículo 62 parchas las grietas y vuelves a vender o a rentar, sabiendo que si hay un nuevo sismo se puede caer y alguien puede morir. La corrupción mata.
«Nadie lo revisa, no hay registro de planos, no hay corresponsables de obra, no hay nada. Sacas un Artículo 62 y luego le vas dando dinero a la Delegación para que no verifiquen», comentó Ades.
Fuente: Reforma