Los retos por delante de la vivienda en renta
La Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios –AMPI-ha establecido como objetivo de 2018 el desarrollo de vivienda social pues en los últimos años, la propia dinámica del mercado ha llevado al sector a enfocarse en el desarrollo de vivienda de los segmentos más caros del mercado y la necesidad de construir vivienda para los sectores más vulnerables de la sociedad es imperante para todos los involucrados.
Construir vivienda para todos es más que necesario pues la dinámica de construcción de viviendas de los sectores residencial y residencial plus ha impactado en los precios del mercado pues, de acuerdo con la Sociedad Hipotecaria Federal –SHF- el precio promedio nacional de la vivienda es de 755 mil pesos, una cifra que corresponde al segmento medio y que excluye a un gran fragmento de la demanda, ese que más requiere de apoyo.
La SHF, además, ha divulgado que los precios de la vivienda en venta en 2017 fueron 6.11% más altos que en 2016, en el caso particular de los departamentos el aumento fue
de 5.96% y en lo referente a las casas de 6.22 por ciento.
Junto con el gobierno, la AMPI busca la creación de programas de acceso a la vivienda para trabajadores que no cuenten con los beneficios que otorgan instituciones como INFONAVIT y FOVISSSTE.
Con una administración que va de salida, ante la incertidumbre de los cambios que podría implementar el nuevo gobierno federal, para Lamudi, no hay que perder de vista bajo ningún momento al artículo 4º constitucional al momento de planear la política bajo
la cual se construirá vivienda en los próximos seis años.
En Lamudi creemos que tampoco se puede perder de vista que los habitantes y la vivienda son el corazón del cualquier parte y nace una ciudad, por lo que construir vivienda de forma inclusiva no exclusiva es una de las rutas que se deben de tomar para llevar a las ciudades mexicanas al camino del desarrollo consciente, ese, que permitirá que sus habitantes tengan calidad de vida que también permitirá que las ciudades estén en equilibrio con el medio ambiente, ese que hará que las ciudades de México sean ciudades sustentables y competitivas.
Fuente: Inmobiliare