¿Estamos ante una crisis de vivienda?
En mi columna de esta semana me gustaría hablar de una situación que ha puesto a los expertos y a un gran número de desarrolladores al margen de las noticias diarias, y no, en esta ocasión no tiene nada que ver con las decisiones de Donald Trump, el presidente de nuestro país vecino; se trata de un problema que poco a poco se está gestando en nuestro propio país y que fue previsto por algunos de los analistas de mayor renombre.
Y es que según los conocedores, la industria inmobiliaria nacional podría sufrir una gran contracción para 2019.
¿Por qué? Permítame explicarle.
Resulta que en el segmento de vivienda las ventas podrían reducirse alrededor de un 7 por ciento, en parte por el difícil proceso de transición que atraviesa nuestra política y una gran parte por el lento inicio que está presentando el sector durante los primeros meses de este sexenio.
Expertos y empresarios han hecho notar que durante el 2018 se vendieron cerca de 308 mil 600 viviendas nuevas, y para 2019 podríamos alcanzar solamente un total de 287 mil, eso sin hablar de los inmuebles con valor debajo de los 400 mil pesos, ya que en ese segmento la cifra se ve recortada dramáticamente.
Y usted segura debe preguntarse, ¿es motivo suficiente para alertarnos?
Aquí le tengo un dato extra, de seguir la situación en el camino que va, el valor del mercado del segmento de vivienda podría llegar a rondar los 314 mil millones de pesos, una cifra muy por debajo de lo que los desarrolladores aseguraban a finales del año pasado.
Pese a que la noticia no es nueva para los participantes en el sector, parece que cada vez se vuelve más evidente que distintos aspectos de la vivienda se verán afectados por las nuevas políticas de gobierno, especialmente por las decisiones de la eliminación del subsidio en el nuevo presupuesto de egresos y la inversión en proyectos poco claros.
Desgraciadamente, los más afectados de estas determinantes son los ciudadanos más necesitados, quienes poco a poco parecen perder la oportunidad de hacerse de un patrimonio propio.
¿No se supone que este gobierno beneficiaría a estos ciudadanos?
Fuente: Luis Ramírez. Director Editorial de Mundo Inmobiliario