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¿Cuáles son los ingredientes de una ciudad bien hecha?

¿Cuáles son los ingredientes de una ciudad bien hecha?

En su segundo día de actividades, CoRe Foro Urbano CDMX 2017, continuó el debate y las propuestas sobre las acciones que pueden ayudar a que nuestra ciudad sea un lugar más amable, habitable y competitivo.
James Von Kemplerer, Presidente de Kohn Pedersen Fox Associates, explicó que si pensamos en cómo está diseñada la ciudad, «es preciso contemplar el concepto de ‘densidad'», que en algunas ciudades, como el antiguo Distrito Federal y algunas otras japonesas, representa un problema.
Sin embargo, la densidad no es el único tema a contemplar. La funcionalidad, la convivencia entre distintos modelos arquitectónicos y las nuevas necesidades de las ciudades son imprescindibles al momento de trazar el mapa.
Microdensificación, azoteas verdes, la herencia arquitectónica y citadina presente (que mantenga la esencia de la ciudad y a la vez permita lugar a la modernidad) son esenciales.

Pero en especial la permeabilidad, entendida como la habilidad de que espacio y peatones convivan sin desplazar uno a otro, es un elemento clave para una ciudad bien diseñada (y el antídoto principal para combatir el problema de la densidad).
Esta densidad tiene que ver con interacciones humanas, espaciales, comercio y cultura, y se tiene que balancear para que no se vuelva intolerable.

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«Tomar el espacio y pensarlo como un punto de encuentro para las personas es el beneficio que la permeabilidad otorgaría a estos sitios».
La permeabilidad se fomenta en lugares de balance, donde la naturaleza se encuentra con una construcción armónica que mejora o crea un espacio público, explicó.
Durante su participación en CoRe Foro Urbano CDMX 2017, Klemperer, también resaltó la importancia del desarrollo de edificios con usos mixtos, en donde diseños arquitectónicos y urbanos en los que, desde la esfera privada, desde la construcción sostenible en términos económicos, se desarrolla una mejora en el espacio público de la localidad.

Von Klemperer indicó que el pensamiento de los planificadores y urbanistas tiene que responder a las necesidades locales.
Sobre esta labor en la Ciudad de México, indicó que quienes diseñan la ciudad deben tener en cuenta el gran tamaño de la urbe y su calidad como una metrópoli multicéntrica que tiene que lidiar con distintos desafíos al mismo tiempo.

Fuente: Dinero en Imagen

 

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