• 55 4984 4441
  • mercadotecnia@lgc.com.mx
Noticias
La infraestructura enfrenta un flaco bolsillo gubernamental

La infraestructura enfrenta un flaco bolsillo gubernamental

La presión financiera que enfrenta el gobierno de Andrés Manuel López Obrador le deja un estrecho margen para reactivar la inversión y acelerar los proyectos de infraestructura, coincidieron especialistas consultados.

Los ingresos del sector público serán de 121,200 millones de pesos (mdp) menores a lo previsto para 2019, por lo que la administración federal tendrá que reducir los gastos por el mismo monto, de acuerdo con los Precriterios Generales de Política Económica 2020.

«Tienes muchas presiones de gastos y tienes poco espacio fiscal para destinar recursos a otras áreas», dijo en entrevista Alejandro Limón, investigador del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP). «Sí se pueden diferir los proyectos que están a más de un año. Le da un poco de flexibilidad, pero no le quita la presión y no se pueden hacer proyectos de infraestructura a corto plazo», explicó.

En los dos primeros meses del 2019, los ingresos totales del sector público cayeron 3.9% a tasa anual, debido a una disminución en los ingresos petroleros (32.7% anual). La caída fue menor por la mejora ligera de la recaudación tributaria que aumentó 3.4% anual en dicho periodo.

Las semana pasada, Hacienda redujo su proyección de crecimiento económico para el país a un rango de 1.1% y 2.1% al cierre de 2019. «El ajuste de proyección impacta de manera directa en la gestión del presupuesto, con menor crecimiento tendremos una menor participación en los ingresos presupuestales», explicó Fernando López Macari, presidente nacional del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF).

www.lgc.com.mx

Aun así, Hacienda prevé solicitar al Congreso 694,490 mdp para financiar el próximo año 86 programas prioritarios del gobierno, entre ellos, proyectos de infraestructura como el nuevo aeropuerto en la base militar de Santa Lucía, el Tren Maya y otros para la modernización de la red ferroviaria y aeroportuaria.

«Con el poco dinero que tienes disponible deberías pensar en maximizarlo para tener rendimientos, pero lo que sucede es que no lo invierten de manera eficiente», señaló Jesús Garza, académico de EGADE Business School. «El Tren Maya no es financiera ni técnicamente viable», comentó el especialista.

El gobierno ha insistido en incrementar la inversión pública y privada en proyectos de infraestructura. Sin embargo, los analistas consultados coinciden que existe incertidumbre para que los inversionistas pongan su dinero en estas obras.

Además, el gobierno tiene poco espacio de maniobra, pues se comprometió a no realizar una reforma fiscal al menos en los primeros tres años ni a endeudarse más.

«El gobierno mantiene su posición de disciplina fiscal, a pesar de la perspectiva macroeconómica debilitada y la producción petrolera más baja de lo esperado», señaló la agencia calificadora Fitch Ratings. Aunque añadió que el gasto que el gobierno recortará para alcanzar su superávit primario y los objetivos del déficit permanece incierto.

Fuente: Obras Web

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *