
Tarzana, desarrollo de “Mini casas” de seis metros cuadrados para ayudar a personas sin hogar en Estados Unidos
En un estacionamiento de Los Ángeles se instaló un desarrollo de mini casas prefabricadas. Esta iniciativa tiene por objeto beneficiar a las personas, a través de este modelo, que no cuentan con una casa propia y además los ayudan a dar sentido a su vida.
En Estados Unidos se ubica en la costa oeste la segunda ciudad más grande del país donde existe una gran población de personas sin hogar y solo la supera la ciudad de New York. Ahí viven miles de personas a la intemperie.
Viven en tiendas dispersas por las calles y cualquiera que pasa por estos lugares, observa las condiciones deplorables y de angustia en las que viven estas personas. Tarzana es un desarrollo en donde se levantaron 76 mini viviendas financiadas por el gobierno local.
El desarrollo está vigilado las 24 horas. Estas mini casas se levantan en 90 minutos. Cada una tiene 6m2 y está equipada con dos camas, estantes, aire acondicionado y calefacción.
El costo es de 6.500 dólares por unidad. Los sanitarios y regaderas son compartidos. Además, cuentan con lavadoras y mesas con sombrillas. En Tarzana, como lo explica Rowan Vansleve, director de finanzas y administración de Hope of the Valley, una ONG que gestiona el lugar, los residentes no pueden quedarse con las llaves de sus mini casas, pero sí pueden bloquear el acceso desde el interior para permitir cierta privacidad.
Rowan Vansleve, señala que la principal ventaja de estas mini casas es la “seguridad”, comparada con vivir en la calle o en un refugio tradicional. Vansleve, describe que el proceso para una persona que se beneficia de este desarrollo comienza con “Una ducha muy caliente, una comida excelente y luego la elaboración de un plan para ayudar al nuevo residente a salir de su situación precaria”.
Además agrega que “Una vez que tenga un plan, le asignaremos una casa pequeña y trabajará en ese plan durante el tiempo que sea necesario”. Sustento diario y un plazo de tres meses Quienes viven en estas mini casas tienen acceso a atención médica, terapia y se les proporcionan tres comidas al día.
Brandon Hanner, gerente de programas de la ONG para el sitio de Tarzana, explica que a los residentes de estas mini casas se les proporciona alojamiento por tres meses y este plazo es renovable hasta que encuentren una vivienda permanente.
Es el primer desarrollo de mini casas de Los Ángeles y abrió a principios de 2021. A este le han seguido otros más. En los últimos años han surgido iniciativas similares en otras partes de California, incluido San José y Seattle.
El fundador del Dream Builders Project, Mayer Dahan, dice que las mini casas pueden ser “una transición muy positiva” para algunos. Aunque le preocupa “el concepto de que se pueden encontrar soluciones tratando de resolver los síntomas, en lugar de resolver el problema de origen”. La abogada principal de la Legal Aid Foundation de Los Ángeles, Shayla Myers, señala que el gran problema es que “hay muy pocas viviendas asequibles para que la gente salga de estas instalaciones de refugio y acceda a una vivienda permanente”.
Myers, si bien reconoce que las mini casas son una mejor opción para algunos, también insiste en que son “increíblemente caras” debido a los costos operativos y que California debe construir más. “No hay forma de resolver la crisis de las personas sin hogar, sin abordar las causas fundamentales, que son la pobreza, la desigualdad de riqueza y la falta de opciones de vivienda asequible”, aclara Myers.
Ahora, la ciudad quiere despejar rápidamente sus aceras de los campamentos de las personas sin un hogar, después de que un juez ordenó que al menos algunas, de las muchas personas sin hogar deben ser colocadas en viviendas para el otoño.