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Inmueble
Pocas viviendas en México cuentan con un seguro de daños

Pocas viviendas en México cuentan con un seguro de daños

México es un país con alta actividad sísmica y está constantemente expuesto a riesgos por fenómenos naturales como huracanes, tormentas y especialmente sismos. Estos fenómenos afectan directamente la integridad de la población y también la de las viviendas.

Por lo que se hace necesario, que las personas tomen conciencia de que cualquier fenómeno natural puede poner en riesgo su patrimonio. Una forma de protegerlo es mediante la contratación de un seguro patrimonial. En nuestro país, el costo de contratar un seguro es de entre $3,175 a $12,605 pesos aproximadamente, dependiendo la institución y la zona en la que se ubique el inmueble.

Según datos de la Encuesta Nacional sobre las Finanzas de los Hogares, realizada por el INEGI, la vivienda es el principal activo no financiero para los mexicanos, sin embargo, la mayoría de la población no cuenta con un seguro para proteger su patrimonio.

Los especialistas indican que el número de riesgos asegurados del sector vivienda es de 7.8 millones y de este número alrededor del 7% tienen un seguro voluntario, el resto del porcentaje está ligado al seguro (obligatorio) adquirido a través de un crédito hipotecario que las personas adquieren.

La Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS) informó que del total emitido en seguros, sólo 35% corresponden a patrimoniales en 2022. Esto significa que uno de cada tres pesos del total de primas protege a los inmuebles de daños provocados por desastres naturales.

Es importante señalar que la razón por la que solo un porcentaje mínimo de viviendas, cuentan con un seguro de desastres naturales es porque los créditos hipotecarios otorgados por instituciones financieras o hipotecarias, como el Infonavit y Fovissste, obligan a contratar un seguro contra daños que protege la vivienda de incendios, explosión, terremotos y de fenómenos como lluvias, huracanes e inundaciones.

Sin duda es necesario contar con un seguro que proteja nuestro patrimonio de las contingencias ambientales. Si bien, es posible adquirir este seguro fuera de los créditos hipotecarios. Se puede contratar el seguro contra daños naturales por otros medios como los bancos o aseguradoras directamente. Es mejor estar protegidos ante cualquier inconveniente.