
La arquitectura inspirada en la naturaleza: Biomimética
Hay muchos ejemplos de esta práctica que el biofísico e ingeniero Otto Schmitt denominó biomimética o biomímesis (del griego bios, vida y mímesis, imitación) y de la que fue precursor el famoso inventor Leonardo Da Vinci. A la fecha, tiene aplicación en prácticamente todas las ramas de la ciencia y la tecnología.
La naturaleza ha demostrado su capacidad de solucionar multitud de problemas, creando soluciones innovadoras, eficaces, con un uso eficiente de los recursos y con la habilidad de adaptarse continuamente.
La arquitectura ha utilizado la naturaleza como fuente de inspiración desde el comienzo de la construcción. Pero más allá de la estética, la naturaleza también da respuestas a otro tipo de necesidades del sector, lo que ha derivado en una tendencia arquitectónica específica, la biomimética.
Esta arquitectura es una filosofía contemporánea que busca soluciones sostenibles en la naturaleza y, por tanto, trata de aplicar las normas que rigen las formas y cuerpos naturales durante todo el proceso de construcción sin centrarse únicamente en la réplica de las formas.
Como resultado, estos mecanismos naturales parecen dar mejor respuesta en cuanto al uso de los materiales empleados y la estructura de los edificios. La biomimética será clave en el diseño industrial y en la arquitectura.
Si queremos implantar diseños de tecnologías de punta, quien mejor lo hace es la propia naturaleza: donde todos sus elementos se autoregulan, con miles de procesos milimétricamente coordinados, no se pierde nada, y con un máximo nivel de reciclaje.
La arquitectura biomimética, podría definirse como el resultado de unir biología y arquitectura con el objetivo de conseguir construcciones eficientes y sustentables.
La naturaleza utiliza una franja muy pequeña de materias primas para la producción de estructuras y materiales mediante procesos muy avanzados, eficientes y con un elevado grado de optimización.
A la hora de enfocarse en la construcción, la biomimética parte de la base de que se puede utilizar la geometría presente en elementos de la naturaleza para crear nuevas estructuras.
La selección de materiales sustentables que puedan dar cuerpo a esa estructura es otro de los puntos más importantes de la biomimética y, aunque en un principio estos elementos puedan parecer solo estéticos, lo cierto es que también añaden un beneficio en términos energéticos.
Gracias a los nuevos materiales empleados en la construcción, los edificios son también más dinámicos y pueden adaptarse al entorno y climatología donde se encuentren ubicados.
La inclusión de otros elementos como la inteligencia artificial al proceso, permite incluso conseguir que estos materiales se regulen de forma instantánea y remota.
El concepto de biomimética cobra vital importancia en los tiempos que vivimos donde se esperan cambios estructurales de los fundamentos de nuestra sociedad (economía, industria, medioambiente).
Finalmente, esta disciplina, se desarrollará cada vez más en la consecución de edificios con cero emisiones y podremos ver a futuro cómo evoluciona esta tendencia y así lograr crear edificios plenamente integrados con el entorno.